El 11 de agosto, en una mañana radiante llena de esperanza, la Alcaldesa Lesbia Castillo, apenas dos semanas tras asumir su cargo, llevó a cabo una significativa visita a la Clínica popular de Mariara “Simón Bolívar”, en el municipio Diego Ibarra. Fue un día marcado por la conexión y el compromiso hacia el bienestar de nuestra comunidad.
Durante esta visita, la alcaldesa se reunió con las autoridades del hospital, donde sostuvieron un diálogo productivo sobre las necesidades urgentes que enfrenta esta vital institución de salud. Escuchar de primera mano los desafíos que enfrentan los profesionales de la salud y cómo estas dificultades repercuten en la calidad del servicio fue un paso crucial para entender cómo podemos contribuir de manera efectiva.
Hoy, con mucho orgullo, regresamos a este querido hospital, trayendo un pedacito de nuestro amor por el pueblo: se entregaron a la institución nuevos aires acondicionados para el laboratorio y un sistema UPS para la máquina de rayos X. Con estas donaciones, buscamos no solo mejorar el ambiente de trabajo para los profesionales, sino también garantizar que nuestros hermanos diego ibarrenses reciban atención médica de calidad. Este es un inicio; venimos a escuchar, a aprender sobre otras necesidades y, paso a paso, a devolver a Mariara el hospital que se merece.
Nada de esto sería posible sin la fuerte dirección de nuestro presidente, Nicolás Maduro, cuyo apoyo incondicional impulsa cada acción que emprendemos. También agradecemos al gobernador Rafael Lacava por su colaboración constante. Un agradecimiento especial va dirigido a nuestro querido amigo y hermano de lucha, el Alcalde Diego Corrales, quien ha sido fundamental en este esfuerzo conjunto para llevar bienestar a nuestra gente.
Al mirar hacia atrás, recordamos con gratitud aquel octubre de 2004, cuando nuestro comandante Hugo Chávez inauguró este maravilloso espacio para el pueblo. Su legado sigue vivo en cada acción que emprendemos; somos gente que resuelve. Gracias a Dios por la salud y por la oportunidad de servir a nuestra comunidad. Juntos, continuaremos construyendo un futuro donde la salud y la calidad de vida sean derechos irrestrictos para todos. ¡Mariara merece lo mejor!
