Hoy, al despertar, mi corazón rebosaba de alegría al ver los avances del Parquecito de la Esperanza. Como alcaldesa de este hermoso municipio, no hay nada que me llene más de satisfacción que observar cómo se materializan nuestros sueños y esfuerzos para brindar bienestar a nuestra gente bonita de Diego Ibarra. Desde el inicio de este proyecto, hemos trabajado incansablemente para crear un espacio donde las familias puedan reunirse, disfrutar de la naturaleza y fortalecer los lazos comunitarios. Cada rincón de este parquecito está diseñado con amor y dedicación, buscando ser un refugio de felicidad para todos, desde los niños que juegan despreocupados hasta los adultos que comparten risas y anécdotas. Los colores vibrantes de los juegos infantiles, los senderos rodeados de plantas y la fresca brisa que acaricia el rostro de quienes pasean por sus caminos, son testigos del compromiso que tenemos como gobierno local. Sabemos que cada banco instalado, es un paso hacia la construcción de una comunidad más unida y feliz. En este rincón de esperanza, vislumbro un futuro brillante para nuestros vecinos. Estoy convencida de que, al fomentar espacios de esparcimiento y convivencia, estamos cultivando la paz, la alegría y el sentido de pertenencia que tanto necesitamos. Queremos que cada habitante de Diego Ibarra sienta el orgullo de vivir en un lugar donde el esfuerzo colectivo se transforma en felicidad compartida. Así que, sigamos adelante, unidos en este camino. Juntos, estamos haciendo grandes cosas por nuestro municipio, y el Parquecito de la Esperanza es solo el comienzo de un sinfín de oportunidades para celebrar la vida y la comunidad que tanto amamos. ¡Viva Diego Ibarra!

